sábado, 30 de enero de 2010

KARL MARX, UN SER MALIGNO EN LA HISTORIA



CARLOS MARX, UN SER MALIGNO EN LA HISTORIA: Todos los derechos reservados.


EENDDTP

Hace poco escuche a alguien en la televisión proclamarse Bolivariano, Marxista y para completar dijo que también era Cristiano, y luego escuche a ese mismo personaje alabar a Marx durante un buen rato y al final casi que lo convierte en discípulo de Jesús de Nazaret y lo emparenta con el Libertador. Esto me indigno en extremo y con suma preocupación pensé que mis compatriotas en especial mis compañeros de armas, que no han tenido la oportunidad de estudiar, o de leer, o de prepararse como yo la he tenido, corren el riesgo de ser confundidos y manipulados con malos propósitos. Aunque en mi formación ideológica estoy absolutamente claro sobre quien fue Marx, decidí documentarme para preparar un escrito al respecto con la finalidad de exponerlo a la luz pública por intermedio de este blog, para combatir en esta ocasión por medio de la artillería del pensamiento, con granadas de palabra escrita, a todas aquellas personas que manipulan la historia con oscuros intereses e ilustrar a todas aquellas que por desconocimiento de la verdad corren el riesgo de ser engañadas y manipuladas. Durante un tiempo me dedique a investigar todo lo que se ha escrito sobre el padre del comunismo, especialmente en Londres ya que ahí vivió y construyo su obra maestra, y como por voluntad de Dios o tal vez casualidad yo también viví, trabaje y estudie ahí, tengo contactos y se dónde buscar, pues conozco bien Londres, pude elaborar este escrito en un tiempo que se podría calificar como corto.

Al revisar todo lo que hay escrito sobre Marx y el comunismo uno se puede dar cuenta que los biógrafos marxistas que escriben sobre Marx omiten a propósito los detalles de su vida privada, no porque estos sean irrelevantes sino porque son tan macabros y asquerosos que escribiendo sobre ellos temen herir mortalmente su ideología y su posibilidad de llegar al poder con el apoyo de las masas, y los que no son marxistas no lo hacen porque tienen miedo de ser objeto tanto de críticas como de ataques por parte de los comunistas. Marx es un personaje que no debería haber tenido trascendencia histórica ya que su vida fue igual o peor a la de cualquier malviviente del Soho de Londres de su época, pero lo que hace obligatoria su presencia en la historia es su obra, ya que creó un poderoso instrumento en contra de Dios y de la fe Cristiana, útil a la opresión y dominación de los pueblos del mundo bajo un nuevo concepto de esclavitud. Ciertamente pienso que fue un pensador y un intelectual pero al servicio del mal, Marx está muy lejos de ser lo que sus fanáticos y seguidores en Venezuela y el mundo dicen de él; y, en Venezuela, y para los venezolanos, su pensamiento es diametralmente opuesto a nuestra fe cristiana, a la esencia de la venezolanidad, a la doctrina Bolivariana y a la Constitución. Marx visto como hombre debe ser considerado un enemigo de la patria y su obra y filosofía como un antivalor para Venezuela y los venezolanos.

En este escrito conoceremos un poco más acerca de ese hombre que en vida respondía al nombre de Karl Heinrich Marx.

Karl Marx nació en Tréveris, Alemania en mayo de 1818, desde niño se caracterizo por ser egoísta y no hacer amistades fácilmente, a causa de su gran soberbia, siempre sus observaciones eran arrogantes y su conducta era falta de respeto para con los mayores o cualquier cosa que representase autoridad o superioridad, de grande fue un hombre egoísta, avinagrado, terco e intrigante, que vivió como desterrado en Francia y Bélgica y posteriormente residió y escribió en Inglaterra donde murió, y de cuya mente broto lo que más tarde se conocería en el mundo como “SOCIALISMO CIENTIFICO” O “EL COMUNISMO”. Marx quería enseñar pero se desvió al periodismo, escribía ridiculizándolo todo, criticando todo, burlándose de todo y todos con quienes estaba en desacuerdo. Sumamente influenciado por las enseñanzas de Ludwing Feuerbach, filósofo materialista alemán, se volvió ateo y aunque no sabía lo que era empuñar un arma siempre clamaba por la guerra en especial en contra de la religión, particularmente la cristiana, toda su vida fue enemigo acérrimo del cristianismo e insultaba y se mofaba con frecuencia de Jesús de Nazaret y sus enseñanzas contenidas en los evangelios. En 1842 vivía en la ciudad de Colonia donde por meterse en problemas con la justicia Prusiana tuvo que viajar con su familia a Francia, luego a Bélgica y finalmente a Inglaterra donde permanecería desde 1849 hasta su muerte en 1883. Tuvo pocos amigos, uno de ellos fue Friedrich Engels, también alemán, a quién conoció en 1842 y que habría de ser quien lo mantendría hasta su muerte, su camarada intelectual, su amigo intimo. Engels por su parte al contrario del excéntrico Marx, era alegre, de buenos modales, procedente de una familia adinerada e interesada en vivir bien, aunque también era ateo y se autodefinía como revolucionario, nunca tuvo que preocuparse por dinero o por trabajar, todo se lo dio su padre. Su amistad intima duro cerca de 40 años, juntos concibieron y formularon la doctrina del COMUNISMO, fueron los padres del Socialismo Científico. Engels vivía en Manchester donde atendía los asuntos de su acaudalado padre, en tanto que Marx vivía en Londres y a diferencia de Engels vivía en la miseria, con frecuencia se enfermaba, padecía de forúnculos, jaquecas y reumatismo. No tenia empleo fijo y jamás lo buscó dependiendo totalmente de “regalos” especialmente de Engels. Se lo pasaba de una a otra casa de empeños, es irónico, pero el padre del comunismo fue literalmente salvado de morirse de hambre por un capitalista.



Las obras clásicas del comunismo, como Das Capital (El Capital), fueron hechas a los trancazos en medio de una situación sumamente difícil. Vivió en dos cuartos amueblados en Dean Street del Soho de Londres. Gustav Mayer, quien lo conoció y entrevisto en Londres escribió esta descripción en un artículo que hoy se encuentra en la Royal Library of London y cuya traducción al español es la siguiente:


“En la vida privada, Marx es un sujeto sumamente desordenado, desagradable y sinvergüenza… En él es una rareza bañarse, lavarse la cara, peinarse, cambiarse de ropa interior y de camisa… Con frecuencia pasa en la ociosidad días enteros, pero si tiene algo que le interesa hacer trabaja día y noche con inagotable resistencia. Muchas veces pasa en vela toda la noche y después, al mediodía, se tira en el sofá, vestido, y duerme hasta que le da la gana, sin que le importe el quehacer de su familia… El cuarto, que da a la calle es el salón, y el de atrás, la alcoba. En todo el departamento no hay un solo mueble limpio y en buen estado. Todo está roto, desvencijado y desgarrado: todo está cubierto por una capa gruesa de polvo, en todas partes se observa el mayor desorden. En el centro del salón hay una mesa grande, cubierta por un mantel de tela encerada que arrastra sobre el suelo. En la mesa se encuentran acumulados manuscritos, libros, periódicos, comida podrida, los juguetes de los niños, pedazos de tela de costura de su mujer, así como tazas de té, de bordes desportillados, cucharas, cuchillos y tenedores sucios, una lámpara, un tintero, vasos, una pipa de yeso holandesa y cenizas. En suma, todo eso se halla amontonado sobre la mesa. Una tienda de trastos viejos tendría que ceder los honores a ese extraordinario conjunto. Cuando se penetra en el cuarto de Marx, la humareda de carbón y tabaco obliga a uno a explorar a tientas la habitación, como si se hallase uno en una cueva, hasta que la vista gradualmente se acostumbra a esas emanaciones y se puede distinguir, como entre la niebla, unos cuantos objetos. Todo está sucio; todo cubierto de polvo. Tomar asiento es algo verdaderamente peligroso. Aquí hay una silla con sólo tres patas; allá los niños juegan a las comiditas; más lejos se descubre otra silla que aún no está rota. Por supuesto, es ésa la que ofrece al visitante, pero sin que se haga ningún intento por limpiar las sobras de la comida que dejó sobre ella. Uno se sienta a riesgo de echar a perder un buen par de pantalones…Tal es el retrato fiel de la vida del jefe comunista Marx.”



El dinero siempre le faltaba. Su hija Franziska murió antes de cumplir un año y gracias a un vecino su mujer pudo pagar el pequeño ataúd para enterrarla, ella, cuando enfermaba no podía acudir al médico ni comprar los remedios porque Marx nunca tenía plata. Solía decir “Durante una semana o más he mantenido a mi familia dándole pan y patatas, dudo que hoy pueda conseguir eso”. Karl Marx era además un inmoral, sabido es que Marx maltrataba a sus hijas, constantemente las insultaba, les pegaba con el cinturón o lo que tuviera al alcance, las pateaba, les gritaba obscenidades, se negó a pagarles los estudios y llevó a que dos de ellas se quitaran la vida tras años de soportar abusos y maltratos sobre todo durante las borracheras de su padre, porque Karl Marx era también un alcohólico, era un borracho que se embriagaba en cualquiera de los abundantes Pubs que siempre han existido en el Soho y en todo Londres y llegaba a su casa a maltratar, golpear e insultar a su familia conformada por puras damas por motivos tan simples como el hecho de que la comida estuviera fría. El motivo de su rechazo a las niñas según escritos de la época, era que Marx siempre deseó hijos varones, de hecho son sabidos los desprecios que propinó a su mujer durante el mismo parto al enterarse del sexo de sus hijas, llegando a decir en el nacimiento de la primera “Mi esposa dio a luz un bebé; desgraciadamente ésta es una niña y no un niño”. Pero por ironía del destino, tal vez castigo de Dios, Helene Demuth, de quien poco se sabe, a la que irónicamente llamaba “Secretaria” y que era la criada de la familia que los había acompañado fielmente durante toda la vida y a la que Marx nunca le pago ni un penique, le dio un hijo varón luego de que probablemente fuera violada por Marx en su propia casa, donde vivía con su esposa e hijas según indican cantidad de escritos de la época; muchos escritores la han llamado “La esclava de Marx”. Cuando el niño nació en 1851 ante la sospechosa “casualidad” que naciera un niño a una mujer que nunca salía de la casa de los Marx y no tenía vida social alguna, todas las miradas cayeron sobre Marx, quien en vez de hacerse cargo obligó a su ricachón amigo, Engels, el mismo que pagaba sus vicios, a reconocer al niño como propio y le pusieron por nombre Frederick Demuth. Tal vez este hombre, el padre del comunismo era un enfermo sexual puesto que el maltrato y rechazo a su esposa e hijas, y a las niñas en general, sumado a su rara amistad intima con Engels y el hecho de haber violado o en todo caso preñado a una mujer que era ya parte de su familia, son indicadores claros de que además de ser un inmoral su salud sexual no estaba bien, era un enfermo.



La vida de Helene fue muy triste. Nacida en una familia de Saarland, Alemania, un 31 de Diciembre de 1820 de jovencita comenzó a trabajar como criada de varias familias hasta llegar a la casa de los Marx, con los cuales posteriormente se mudó a Londres. La situación social de Helene no era muy buena, de hecho sus servicios no se pagaban con dinero sino que, por órdenes del padre del comunismo, se le daba solo lo indispensable y un techo. Helene vivía en una situación servil comparable a la de un sirviente liberto romano. Poco se sabe de la relación entre ambos ya que Marx siempre negó la paternidad. De todas maneras, gracias a una carta escrita por Louise Freyberger a August Bebel fechada en el año 1898, sabemos que Marx no solo no reconoció al joven, sino que además lo despreció y constantemente lo execro. Semejante secreto carcomería la conciencia de Engels, quien en su lecho de muerte ya sin casi poder hablar, confesaría a Eleanor, la hija menor de Marx, entre otras cosas, la verdad sobre el origen bastardo de Frederick Demuth.



Definitivamente, un hombre el cual se llenó la boca hablando de expropiaciones, de explotación capitalista, de los derechos de los trabajadores y de la lucha violenta en contra de los explotadores tuvo una sirvienta a la cual nunca le pagó un solo sueldo, y que tras embarazarla cobardemente hizo pasar por padre a un amigo. Ante este hecho a este hombre no se le puede llamar de otra manera que hipócrita, Karl Marx fue también un hipócrita.

Era muy testarudo, su empeño era escribir culpando al capitalismo de la pobreza mientras permitía que su familia se muriera de hambre sin hacer nada pues no le gustaba trabajar. Muchos escritos de la época atribuyen a la madre de Marx el siguiente comentario: “En lugar de escribir en contra del capital le convendría más a Karl reunir un poco de capital”. Engels era el que lo mantenía, pero también recibía esporádicamente algunos ingresos de algún pariente o de algún escrito que lograba vender. A eso de 1850 el tío de su esposa, un hombre de bienes logrados a punta de trabajo y que había sido siempre muy saludable, enfermó, Marx, en una carta escrita a Engels el 27 de Febrero de 1852 reflejo lo miserable de su espíritu al escribir a su amigo intimo y benefactor lo siguiente: “La única buena noticia que tenemos es de mi cuñada, sobre la enfermedad del tío de mi mujer. Si esa bestia muere, saldré de mis presentes apuros”, en ella expresaba su deseo de que muriera por la sola y ruin apetencia del dinero de este hombre que por derecho le correspondía en todo caso a su mujer y no a él. No hay que revisar muchos libros para darse cuenta que la mente de Marx estaba pervertida y llena de prejuicios, pero también era incisiva y aguda. Era muy estudioso de la historia, de la filosofía y de la economía. El 2 de Marzo de 1852 Engels le contestó: “Mis parabienes por la noticia de la enfermedad del viejo obstruccionista de la herencia, espero que pronto le llegue el fin” con lo que también reflejaba la calaña de su espíritu. No hay duda de que ambos eran unos miserables.

En su mente este teórico del socialismo revisaba el mundo y con su arrogante orgullo creía que podía fundirlo y cambiarlo a su propia manera y estilo de vida, a través de sus escritos y sus “organizaciones revolucionarias” emprendió esa tarea, que fue
Desarrollando en dos líneas de ataque al orden existente.

1. UN CONCEPTO ATEO DEL MUNDO, para ello unió dos ideas muy antiguas, la primera es que todo el universo ya sea un tallo de hierba, un ser humano o la sociedad misma está cambiando constantemente y al mismo tiempo se halla en conflicto, a eso le llamo DIALECTICA.

2. QUE DIOS NO EXISTE y el mundo está conformado exclusivamente de “materia viviente”, de ahí que el hombre sea polvo que se muere sin la chispa o la imagen de un creador divino (Dios). Esa idea se llama MATERIALISMO.

De ahí surge entonces el “MATERIALISMO DIALECTICO” que se convierte a partir de ese momento en la base de toda “Idea Comunista del Mundo”. Afirma Marx que el género humano, lo mismo que el universo de la materia, se encuentran afectados por esa idea ya que como el ser humano no tiene nada de divino y solo es materia que muere tiene aplicación universal. Marx decía que la lucha constante y encarnizada no era mala, porque alcanza el progreso. De hecho, consideraba toda la historia del mundo como una constante lucha entre clases. Por cierto, con respecto a esta teoría, es oportuno mencionar aquí mi experiencia personal vivida en el mismo lugar donde este hombre la desarrolló.

En 1989 fui designado para cumplir misión en Londres, Inglaterra. Muy rápidamente me acostumbre al ordenado y apurado estilo de vida de sus habitantes, de vez en cuando en las tardes cuando salía de clases en el Pitman Business College iba a curiosear en las tiendas de armas antiguas y sobre todo las librerías que se encuentran por cantidades y de todo tipo en el lado este del Soho (donde vivió, Karl Marx) en el área de Charing Cross Road (Hay un refrán que dice: “Si existe un libro en Londres no lo dudes, está en Charing Cross”) en especial me gustaba ir a una inmensa tienda que se llama Foyles, en el camino a esta librería , siempre me encontraba y le compraba la prensa del día a un viejo vendedor de periódicos que a las 4pm puntualmente, todos los días, estaba parado en la esquina de Grafton Way con Tottenham Court Road vendiendo el diario vespertino “The Evening Standard”, Charles era su nombre, por respeto a su avanzada edad yo le llamaba “Mr. Charles” o “Lord Charles”. Siempre que me detenía a comprarle el periódico se generaba una amistosa conversación sobre algo, a veces hablábamos de lo caro que estaba todo, de fútbol, de mi patria Venezuela, de Gales su tierra natal, del Generalísimo Francisco de Miranda quién vivió a una cuadra de ahí, de las últimas decisiones políticas de la Primer Ministro Margaret Thatcher, de la Segunda Guerra Mundial pues Charles era veterano de guerra, etc. En muchas ocasiones hablamos sobre el comunismo y la para entonces todavía existente URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas) que en esos momentos se estaba desmoronando. En una de esas conversaciones Charles abordo el tema del padre del comunismo, Marx, enterándome por primera vez que había vivido y escrito sus teorías fundamentales muy cerca de donde estábamos, en el Soho. En una de esas conversaciones con “Lord Charles” que siempre se iniciaba con el ultimo acontecimiento en la URSS reseñado por los diarios, mi viejo amigo me contó algo que le había sido contado por su padre quien a su vez lo había escuchado de su abuelo y es que la idea de la lucha de clases le vino a la mente a este oscuro personaje luego de presenciar detenidamente una pelea de perros en el Soho, en la cual una jauría de perros callejeros atacó y le arrebato a otros un mendrugo de pan que les había sido arrojado por un transeúnte, dicen que Marx contemplando el espectáculo sonreía y comentaba “Esa es la lucha que nunca ha de acabar, la lucha del que no tiene en contra del que tiene, es la lucha de clases” su recientemente creada teoría del “Materialismo Dialectico” le permitía colocar en el mismo nivel de los perros a los seres humanos. Marx afirmaba que la humanidad siempre ha estado dividida en clases o grupos con especiales intereses, ideales y maneras de hacer las cosas, esas clases, añadía, “Han estado luchando entre sí desde el principio de los tiempos y siguen luchando, la lucha es buena y hay que estimularla”.

Marx explicaba la lucha por medio de una fórmula especial llamada comúnmente la dialéctica de tesis-antítesis-síntesis, que tomó y deformó de la filosofía del famoso pensador alemán George Wilhelm Friedrich Hegel de la siguiente forma:

1. TESIS: Esa es la clase con el poder dominante en la sociedad, tiene en sus manos los medios de producción, la forma como se construyen las casas, la clase de ropa que se lleva, y así por el estilo.
2. ANTITESIS: Es la clase que no tarda en surgir para tratar de destruir a la primera por que tiene diferentes ideales, motivos y ambiciones y que desata la lucha.
3. SÍNTESIS: Es la nueva clase que resulta luego de que termina la lucha y es destruida la tesis, de acuerdo a la mente de Marx va a tener lo mejor de las dos antiguas clases (Marx no explica porque no es posible que se filtre lo malo de ambas clases en la nueva clase y esto es lo que ha pasado en todos los experimentos comunistas (Socialistas) que se han desarrollado en el mundo pues lo malo y lo violento siempre ha relegado a lo bueno y lo sabio y se ha hecho con el poder que luego no quiere abandonar por ninguna razón, en Venezuela actualmente tenemos un excelente ejemplo).

Marx llama CAPITALISTAS y clase dominante a los propietarios de industrias, negocios, bodegas, etc., a todo el que tenga algo. etiquetándolos como TÉSIS, y a la los empleados PROLETARIADO etiquetándolos como ANTÍTESIS; sosteniendo en sus escritos que una vez sea destruida la TÉSIS y se consolide la SÍNTESIS el proceso debe repetirse, ya que esta se convierte en una nueva TÉSIS y que por lo tanto debe surgir una nueva ANTÍTESIS que desate la lucha contra ella y la destruya convirtiéndose a su vez en TÉSIS y así de manera cíclica continúe la lucha constante ( lucha de clases ) hasta que se llegue a un “ápice” o nivel ideal que es EL COMUNISMO, en ese punto, según la mente de Marx, el conflicto cesa llegando a conformarse la “sociedad perfecta”, un mundo nuevo sin estados, sin clases sociales y sobre todo SIN DIOS, en la que todos los bienes empleados en la producción sean del dominio común, y las actividades humanas se ajusten al principio de que cada uno reciba de acuerdo a sus necesidades (Marx omitió en su teoría y nunca pudo explicar el por qué cesa el conflicto y como, por lo que se puede calificar su teoría como errónea puesto que siempre habrá alguien que quiere el poder y que pasa por sobre lo que sea para lograrlo, eso siempre ha sucedido en el mundo, sobre todo en las naciones que han tenido la desgracia de caer en manos del comunismo).

Marx habla también del Partido Comunista dándole un papel en la lucha de clases entre la clase capitalista y el proletariado, dice Marx: “El Partido comunista debe ser la vanguardia del proletariado, la mayoría de los trabajadores son unos estúpidos, no educados en el marxismo pero si en el capitalismo, por sí mismos nunca podrían iniciar una revolución, necesitan que se les guíe, y esa labor es del partido comunista, que tiene como cometido ser “El Estado Mayor de la Revolución”. Marx dice que: “Como es natural la sociedad capitalista nunca va a entregar voluntariamente sus negocios, propiedades y dinero y que probablemente organizaría una contrarrevolución, o lo que es lo mismo se defendería. De ahí que, bajo la jefatura del partido comunista los trabajadores deben estar dispuestos, si es necesario, a recurrir a la fuerza, es decir, a la revolución violenta para quitarles todo”. También dice Marx lo siguiente: “Si los capitalistas se someten sin oponer resistencia, magnifico; si se resisten, habrá que aniquilarlos”.

Según Marx, después de alcanzar el poder “Quedará una oposición que será preciso destruir en forma absoluta, completa y sin misericordia” y plantea que hay que seguir adiestrando y sometiendo a la clase trabajadora a un entrenamiento y adoctrinamiento total y único en el pensamiento marxista (Su manera y estilo de concebir el mundo) para evolucionar hacia lo que este hombre llamó “LA DICTADURA DEL PROLETARIADO” que es supuestamente una transición entre la REVOLUCION y la forma definitiva del COMUNISMO. Y de acuerdo a Marx ¿Quién debe dirigir la dictadura del proletariado?, Por supuesto, el Partido Comunista o Socialista, y, ¿Qué haría esa organización según Marx? “Servir de aplanadora liquidando por la fuerza bruta si es necesario todos los elementos capitalistas. Entonces y solo entonces, puede empezar la nueva construcción “socialista”.

La dictadura que existió en la extinta URSS y sus países satélites con sus policías secretas persiguiendo al de pensamiento diferente al igual que a un delincuente, sus campamentos de trabajos forzados y su reglamentación para la educación y el adoctrinamiento en masa constituyen un claro ejemplo de la instalación de la dictadura del proletariado en un estado. En la actualidad, en los sistemas totalitarios de corte socialista existentes en el mundo, los términos capitalista, burgués o contrarrevolucionario son usados igualmente para calificar a cualquier persona u organización que se opone al totalitarismo socialista y/o comunista, a cualquiera lo pueden calificar de capitalista aunque no tenga un centavo.



Karl Marx en 1848 con la ayuda de Engels, preparó el programa de “La Liga Comunista”, organización revolucionaria que incluía para ese momento a un gran número de desterrados alemanes y resentidos sociales. Fue ese el famoso “MANIFIESTO COMUNISTA”, el primer plan general de los propósitos comunistas. En el mismo el lenguaje es violento, las amenazas terribles, comienza con una frase infernal: “Un Espectro se pasea por Europa, el espectro del comunismo”, y termina excitando al derrocamiento violento de la sociedad existente de la siguiente forma: “Que tiemblen las clases gobernantes ante la revolución comunista. Los proletarios nada tienen que perder, salvo sus cadenas. Tienen en cambio un mundo que ganar. ¡Trabajadores de todo el mundo uníos!”. Finalmente resulta imperioso citar otras dos horrendas frases del discurso de este maligno ser, Marx dijo en 1848 que: “No se puede depender de hombres de buenas intenciones y bondadosos para el mejoramiento de la sociedad porque son aficionados torpes que empeoran las cosas” y dijo “El Capitalismo debe ser destruido completamente. Recúrrase a la fuerza y a la violencia ¡ESTABLEZCASE UN GOBIERNO COMUNISTA!”

Marx, hasta su muerte sucedida en Londres, el 14 de marzo de 1883, fue un fanático, un ser intolerante, altanero, soberbio, despiadado, envidioso y vil; la invectiva, la ira, el insulto, la amenaza, la infamia y la calumnia eran sus armas, defendía retadoramente su punto de vista contra todos aquellos que lo debatieran, denunciaba con encono a cuantos no se hallaban de acuerdo con él como Ferdinand Lasalle, el dirigente socialista alemán y Mikhail Bakunin, el anarquista ruso. Conducía “Batallas” verbales que duraban años enteros. Siempre, por la astucia, la mentira, la manipulación y las amenazas, trato de imponer su propio punto de vista, si comprendía que tal cosa era imposible, se esforzaba intensamente por destruir a su oponente acusándolo de ladrón o de lo que fuera, calumniándolo como fuera, todo el que tenía algo para Marx era un ladrón excepto Engels a quien calificaba de revolucionario pero todo el mundo sabía que era porque lo mantenía, Karl Marx además de mantenido fue un malviviente a quien los dirigentes políticos de su época tenían temor por su maldad y el veneno de su lengua. Pero el veneno de este ser miserable no solamente alcanzó para insultar y ofender a Cristo manipulando y distorsionando la doctrina de la fe cristiana, no solamente alcanzó para insultar y ofender a los personajes de su época, también alcanzó a hombres y mujeres ilustres que ya habían fallecido; sentía envidia cuando alguien comentaba los méritos y las hazañas del General George Washington, o del Duque de Wellington, o del Almirante Nelson u otro héroe o personaje ilustre ya fallecido arremetiendo en el acto con su lengua contra ellos, calumniándolos, menospreciando sus hazañas y transformando sus virtudes en defectos mediante la manipulación de la cual era experto. Este hombre que no respetaba la autoridad ni a las personas que en méritos o intelectualmente lo superaban, tampoco respetaba a los muertos, he ahí la muestra de su vileza.

Karl Marx también ofendió la memoria de nuestro Libertador y por ende al pueblo venezolano en su obra “SIMON BOLIVAR” elaborada en 1857, la cual reposa en los archivos del Instituto Marx-Engels-Lenin de Moscú. En 1857 Charles Anderson Dana que era Director del New York Tribune solicitó a Marx y a Engels unas biografías para incluirlas en la New American Encyclopedia. Las biografías fueron escritas, y Marx elaboró la de Simón Bolívar, al tiempo, Charles Dana la devuelve con una gran cantidad de observaciones por el tono prejuiciado y ofensivo en contra de Simón Bolívar con el que había sido escrita exigiéndole que se documentara más sobre nuestro Libertador. Marx escribe una carta a su amigo intimo Engels fechada en Londres el 14 de Febrero de 1858 en la que le comenta sobre los reclamos de Dana diciéndole lo siguiente: “En lo que toca al estilo prejuiciado, ciertamente me he salido algo del tono enciclopédico, pero hubiera sido pasarse de la raya querer presentar como Napoleón Primero al canalla más cobarde, brutal y miserable. Bolívar es el verdadero Soulouque” la sola comparación con el llamado “Emperador” negro Souluque, dictador haitiano que surgió de entre los esclavos para cometer fechorías contra su propia gente, pone a nuestro Libertador, desde el envidioso y retorcido punto de vista de Marx en la posición de un dictadorzuelo oportunista y demagogo.



Marx define a Bolívar como “Un descendiente de familias mantuanas que en la época de la dominación española constituían la nobleza criolla en Venezuela”, afirma que “El Libertador rehusó adherirse a la revolución que estalló en Caracas el 19 de abril de 1810, a pesar de las instancias de su primo José Félix Ribas”, afirma que “La misión de Simón Bolívar, Andrés Bello y Luís López Méndez a Londres centró su importancia fue en conseguir la autorización para exportar armas, teniendo que abonarlas de contado y pagar fuertes derechos”, describe como “Una huida cobarde y a escondidas de Bolívar para ocultarse en San Mateo y con posterioridad participar, personalmente, en el asalto y detención de Miranda en La Guaira, traicionándolo de esta forma al entregarlo engrillado al General español Monteverde, quién lo envió a Cádiz donde luego moriría” e indica que “Esta traición fue debidamente recompensada con la expedición del pasaporte español a Bolívar, en reconocimiento por sus servicios prestados al Rey de España con la entrega de Miranda”, describe la victoria en la toma de Santa Marta en 1814 como “Una hazaña en la cual, a pesar de que la ciudad ya había capitulado, Bolívar le permitió a sus soldados que la saquearan durante cuarenta y ocho horas”, describe la retirada a Jamaica en 1815 como “Una huida de Bolívar durante ocho largos meses, mientras los Generales patriotas ofrecían su tenaz resistencia en Venezuela”, de la Carta de Jamaica dice que “Es una defensa de Bolívar ante su fuga de los españoles, en la cual pretendió presentar su renuncia al mando supuestamente en aras de la paz pública”, describe como “Otra huida cobarde de Bolívar la de 1816 frente a una diminuta fuerza del General Morales en Valencia, que lo llevó a retroceder a rienda suelta hasta Ocumare (de la costa) para saltar y embarcarse a bordo del Diana rumbo a Bonaire, dejando a todos sus compañeros privados del menor auxilio. De allí que Piar haya amenazado a Bolívar con someterlo a un consejo de guerra por deserción y cobardía”, Piar es para Marx “El héroe singular de la conquista de Guayana que le da un vuelco favorable a la guerra de independencia”. Bolívar es “El dictador traidor y cobarde que (de nuevo) abandona a Arismendi en 1817 en Margarita en manos de los españoles, y luego a Freites en la Casa de la Misericordia en Barcelona, donde éste muere en batalla”, frente a ello según Marx Piar no escatimaba sarcasmos contra Bolívar llamándolo “El Napoleón de las retiradas” asegurando que “Bajo falsas imputaciones de haber conspirado contra los blancos, atentando contra la vida de Bolívar y aspirado al poder supremo, es que Piar es fusilado en Angostura”, Marx ofende a todos los venezolanos al afirmar que “La conquista de Nueva Granada no se le debe a Bolívar ni a las tropas patriotas, sino a las tropas extranjeras, compuestas fundamentalmente por ingleses”, al respecto para ofender nuevamente al Libertador dice que tras dejar en funciones al Congreso granadino y al General Santander como Comandante, Bolívar marchó a Pamplona, “Donde pasó más de dos meses en festejos y saraos”, También dice que “La guerra se prolongó por cinco años más debido a la cobardía de Bolívar en Calabozo en 1819, al no haber decidido avanzar sobre las tropas inferiores en número de Morillo, y que la tregua del Convenio de Trujillo en 1920 con Morillo fue hecha a espaldas del Congreso de Colombia”, en cuanto a la Batalla de Carabobo Marx dice que “A Bolívar le pareció tan imponente la posición del enemigo, que propuso a su consejo de guerra la concertación de una nueva tregua, idea que, sin embargo, rechazaron sus subalternos”, con respecto a la campaña de Quito en 1822 dice que “Los éxitos se debieron a los oficiales británicos”, con respecto a Bolivia dice que como estaba “Sometida a las bayonetas de Sucre, Bolívar dio rienda suelta a sus tendencias de despotismo”, del Congreso de Panamá de 1826 dice que “Fue convocado por Bolívar con la intención real de unificar América del Sur en una república federal, cuyo dictador quería ser el mismo”, en relación al mandato de Bolívar al frente de la Gran Colombia Marx dice que “Fue planeado por él para satisfacer sus apetencias de poderes dictatoriales”, también dice Marx que “En 1830 Bolívar pretendía invadir a Venezuela desde Colombia para someterla, pero se asusto frente al ejército de Páez, y se vio entonces obligado a presentar su dimisión, a condición de que se retirara al extranjero favorecido con una pensión anual”, finalmente, citando al General Henri L. V. Ducoudray-Holstein, hace la siguiente descripción del Libertador “Tiene frecuentes y súbitos arrebatos de ira, y entonces se pone como loco, se arroja en la hamaca y se desata en improperios y maldiciones contra cuantos lo rodean. Le gusta proferir sarcasmos contra los ausentes, no lee más que literatura francesa de carácter liviano…Le agrada oírse hablar, y pronunciar brindis le deleita”.

Karl Marx fue enemigo declarado del padre de nuestra patria sin ni siquiera haberlo conocido, además ofendió e insultó al pueblo de Venezuela, Karl Heinrich Marx fue en vida un enemigo de Venezuela y su obra, el comunismo, es un instrumento de poder fundamentado en el odio, la violencia y la irracionalidad que humilla la dignidad humana y degrada la sociedad; el Comunismo es contrario al pensamiento, vida, obra y doctrina de Simón Bolívar El Libertador, es contrario a la memoria y legado de todos los próceres de la independencia, fundadores de nuestra nacionalidad, es contrario a la Libertad razón de la existencia de esta nación puesto que de ella emanó hacia el resto de la América Hispana, es contrario a nuestra Constitución y sobre todo, es contrario a Dios y a la fe cristiana sobre la cual fue fundada esta república, ya que el Marxismo, o Socialismo Científico, o Socialismo del Siglo XXI como pretenden llamarlo ahora los discípulos de Marx en Venezuela haciendo uso de su legado de manipulación y engaño, es una herramienta ideal para que tiranos, dictadores y asesinos esclavicen a los pueblos en nombre de la libertad.

Al finalizar este escrito solo me queda por concluir que Simón Bolívar es luz y Karl Marx Oscuridad, por lo tanto colocar la vil imagen de Marx y todos esos tiranos, dictadores y asesinos que lo han seguido, como es el caso de Fidel Castro y el Che Guevara al lado de la fulgurante imagen del Libertador y nuestros héroes de la independencia, es una ofensa a su memoria y una humillación a Venezuela. Decir que se es Cristiano, Bolivariano y Marxista a la vez refleja o una profunda ignorancia o una descomunal falsedad, tal vez sea una gran trampa, típica del comunismo, para engañar a los ciudadanos de los sectores desposeídos de nuestra población, que son los más numerosos, manipulando su fe y su fervor patriótico para llevarlos como ovejas a la esclavitud comunista, decir que existe un “Socialismo Bolivariano”, bajo la perspectiva del socialismo científico de Marx o comunismo, es además de una ofensa al Libertador y a Venezuela, una aberración histórica y doctrinaria. Tratar de destruir el estado democrático venezolano y a sus instituciones, para sobreponer sobre él un estado o república marxista no es otra cosa que TRAICION A LA PATRIA.

Muchos amigos y compañeros de armas que me han visitado y han podido compartir conmigo este escrito antes de publicarlo, en virtud de que aún estoy sometido, desde hace casi dos años, a un proceso penal militar por haber cumplido con mi deber de oficial y mi juramento de soldado cuando era un Oficial General en servicio activo, me han recomendado que tenga cuidado, que no lo publique o que lo suavice, ya que estamos en dictadura y como el dictador y sus cómplices ya se han quitado la careta de demócratas y se han declarado marxistas fervientes, corro el riesgo de ser insultado, calumniado, agredido, acusado de cualquier cosa y encarcelado o muerto. Pero no lo voy a hacer, no lo voy a guardar en la gaveta ni lo voy a suavizar porque eso sería una actitud cobarde que nunca he tenido. No puedo permitir que el miedo me domine y quedarme callado, mientras que mi patria es humillada y destruida para sobreponer sobre sus cenizas una república marxista, mientras que la fe cristiana es atacada, mientras que la tiranía aprisiona con cadenas a la patria y los poderes extranjeros que la apoyan hunden sus colmillos en ella, mientras que los traidores aplauden, mientras que los cobardes miran hacia un lado haciéndose los desentendidos, mientras que los miserables como animales carroñeros tratan de aprovecharse económica y/o politicamente de los pedazos que caen y mientras que la mayoría de los ciudadanos piden a gritos ¡LIBERTAD! ¡LIBERTAD! ¡LIBERTAD! esa sería una actitud cobarde que nunca he tenido, jamás me quedare callado, por el momento las armas que tengo son la pluma, la tinta y el papel, pero, si Dios me da la oportunidad de hacer algo más, sin duda lo haré.


Saludo libertario: 
Ángel Vivas



¡MUERA LA TIRANÍA VIVA LA LIBERTAD!
GENERALÍSIMO DE MAR Y TIERRA DON FRANCISCO DE MIRANDA
2 DE FEBRERO DE 1806





FUENTES CONSULTADAS
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PENSAMIENTOS PARA VENEZUELA Y EL MUNDO, Vivas R. Silvino, Editorial El Incendio, 1966.
MARX, LENIN, STALIN Y LA REVOLUCION RUSA. J.E. Hoover, Editorial SIC, Caracas, Venezuela, 1950.
ALERTA A OCCIDENTE, Alexander Solzhenitzyn, 3ra edición, 1977.
ENCICLOPEDIA BRITANICA (BRITISH LIBRARY), MARX DESCRIPTION, Gustav Mayer, 1942.
KARL MARX AND THE CLOSE OF HIS SYSTEM, Bawerk Bohm, 1898.
THE OPEN SOCIETY AND ITS ENEMIES, Popper Karl, Segunda Edición, 1966.
INTELLECTUALS, Paul Johnson, 1
http://krokotanarur.hu/RETURN/UKRAINA/Holocausto%20Comunista%201%20-%201917-1945.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Karl_Marx
http://www.monografias.com/trabajos5/marx/marx.shtml
http://www.britannica.com/EBchecked/topic/367265/Karl-Marx
http://www.aceprensa.com/articulos/1997/nov/05/holocausto-comunista-110-millones-de-muertes/
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